Un mamógrafo diagnosticará las patologías de las mujeres refugiadas en los campamentos de Tinduf.
Un equipo médico con seis doctores viajará a los campamentos de refugiados del Sahara, en Tinduf, para realizar diagnósticos de patologías mamarias, entre el 5 y el 13 de marzo. La asociación asturiana de Amigos del Pueblo Saharaui ha organizado el proyecto en colaboración con el Ayuntamiento de Oviedo, que aporta 5.400 euros para los gastos relativos al viaje y la manutención de los seis profesionales sanitarios.
Un equipo médico con seis doctores viajará a los campamentos de refugiados del Sahara, en Tinduf, para realizar diagnósticos de patologías mamarias, entre el 5 y el 13 de marzo. La asociación asturiana de Amigos del Pueblo Saharaui ha organizado el proyecto en colaboración con el Ayuntamiento de Oviedo, que aporta 5.400 euros para los gastos relativos al viaje y la manutención de los seis profesionales sanitarios.
Dos médicos especialistas en radiología y anatomía patológica, una enfermera, dos técnicos en radiología y un técnico en electromedicina serán los encargados de atender a las mujeres de los asentamientos de refugiados del Sahara. El objetivo fundamental de la expedición es diagnosticar, a través de un equipo de mamografía instalado en el Hospital de Raguni y de técnicas de anatomía patológica, dolencias como el cáncer de mama.
Según Carlos López Muñiz, radiólogo miembro del equipo médico, «nuestra intención es ayudar a la población más desfavorecida. Esta vez colaboraremos con el proyecto del doctor Francisco Díaz Cadórniga, que se dedica a la atención de problemas endocrinológicos, tales como enfermedades de tiroides o diabetes».
La concienciación de las mujeres saharauis sobre la importancia de la realización de mamografías es otra de las tareas del equipo. «Antes de partir a Tinduf, nos pusimos en contacto con las autoridades sanitarias del país y les enviamos carteles explicativos sobre qué es una mamografía y los grupos de edad que deben chequearse. La información se repartió entre toda la red médica de atención primaria de los campamentos de refugiados y se publicitó en varios medios de comunicación locales», comenta López.
Este proyecto se desarrolla en Tinduf desde hace cinco años, pero, a diferencia de otras ocasiones, no se hará cirugía endoscópica al no poder disponer del servicio de anestesia para operaciones.
Además del diagnóstico de patologías, el equipo técnico mantendrá y reparará el material del Hospital de Raguni, que se utiliza de manera ininterrumpida a lo largo del año por diferentes expediciones sanitarias. La formación de personal saharaui en el funcionamiento de los mamógrafos será otra de las misiones del personal médico asturiano.
Luis Alberto Suárez Montiel, vicepresidente de la asociación asturiana de Amigos del Pueblo Saharaui, cree que es necesaria la creación de un programa específico de ayuda a los refugiados: «Es triste que después de 35 años exiliados no exista un proyecto solidario permanente de la ONU como el que tienen los palestinos. El problema humanitario del Sahara se trata como una crisis de emergencia».
La asociación Amigos del Pueblo Saharaui proyecta también para el verano el programa de acogida infantil «Vacaciones en paz», en el que participan cincuenta familias.
Según Carlos López Muñiz, radiólogo miembro del equipo médico, «nuestra intención es ayudar a la población más desfavorecida. Esta vez colaboraremos con el proyecto del doctor Francisco Díaz Cadórniga, que se dedica a la atención de problemas endocrinológicos, tales como enfermedades de tiroides o diabetes».
La concienciación de las mujeres saharauis sobre la importancia de la realización de mamografías es otra de las tareas del equipo. «Antes de partir a Tinduf, nos pusimos en contacto con las autoridades sanitarias del país y les enviamos carteles explicativos sobre qué es una mamografía y los grupos de edad que deben chequearse. La información se repartió entre toda la red médica de atención primaria de los campamentos de refugiados y se publicitó en varios medios de comunicación locales», comenta López.
Este proyecto se desarrolla en Tinduf desde hace cinco años, pero, a diferencia de otras ocasiones, no se hará cirugía endoscópica al no poder disponer del servicio de anestesia para operaciones.
Además del diagnóstico de patologías, el equipo técnico mantendrá y reparará el material del Hospital de Raguni, que se utiliza de manera ininterrumpida a lo largo del año por diferentes expediciones sanitarias. La formación de personal saharaui en el funcionamiento de los mamógrafos será otra de las misiones del personal médico asturiano.
Luis Alberto Suárez Montiel, vicepresidente de la asociación asturiana de Amigos del Pueblo Saharaui, cree que es necesaria la creación de un programa específico de ayuda a los refugiados: «Es triste que después de 35 años exiliados no exista un proyecto solidario permanente de la ONU como el que tienen los palestinos. El problema humanitario del Sahara se trata como una crisis de emergencia».
La asociación Amigos del Pueblo Saharaui proyecta también para el verano el programa de acogida infantil «Vacaciones en paz», en el que participan cincuenta familias.
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